El argentino Jonathan “Yoni” Barros se impuso ampliamente al mexicano Miguel “Mickey” Román, por puntos, en fallo unánime, tras doce asaltos, y así defendió con éxito por primera ocasión su título mundial pluma de la Asociación Mundial de Boxeo (AMB), en el combate estelar de la velada desarrollada en la noche del sábado, en el Polideportivo La Colonia, en la localidad de Junín, provincia de Mendoza, Argentina.
Haciendo un boxeo inteligente desde la media distancia, donde mantuvo lejos al peligroso mexicano con un jab de izquierda en punta con el que frenó cada avance rival, el mendocino fue edificando una cómoda victoria. A pesar de haber sufrido algún impacto en gancho zurdo arriba en el segundo episodio y esporádicas derechas cruzadas, el campeón trabajó correctamente con su izquierda, y fue desgastando al retador, que mermaba en su precisión. Sumado a un incansable trabajo de piernas, con pasos laterales y movimientos de cintura, se apegó a su libreto, y además logró conectar de contragolpe su gancho izquierdo arriba y abajo, y su derecha en cross al rostro. Al final, el campeón se lució bailoteando de lado a lado, mientras castigaba desde lejos, para acabar con el cinturón en su poder, ante el delirio de su público.
Las tarjetas de los tres jueces expresaron en números la diferencia exhibida, al decretar: Ricardo Duncan (Panamá) 118-110, John Poturaj (Estados Unidos) 118-109, y César Ramos (Puerto Rico) 117-111, todas en favor del argentino. Para NotiFight.com, la victoria de Barros fue de 118-112.
Con la campana inicial, comenzaron los jabs de izquierda del local, para mantener alejado al peligroso rival. Sin ocasionar demasiado daño, frenó los avances visitantes con continuos impactos al rostro.
Pero en el segundo capítulo, Román conectó un potente gancho zurdo a la mandíbula, con que hizo retroceder al mendocino. Segundos después, dio el paso al frente y arremetió al cuerpo, hasta que el cuyano trabó para frenar el envión.
El trabajo de contragolpe de Barros volvió a prevalecer en el siguiente. Mientras el azteca procuraba acortar la distancia, el nacido en Guaymallén, Mendoza, aprovechó los espacios para acertar su izquierda en punta al mentón, y algún su cross diestro, tocando y saliendo. Si bien respetaba la pegada rival, “Yoni” dio un paso adelante e impactó una potente zurda curva a la mejilla, que acusó recibo en el visitante.
Las diferencias crecían cada vez que el campeón desgastaba a su oponente con ese constante jab izquierdo que se repetía en el cuarto, al rostro y al cuerpo de un mexicano que, frontal y algo estático, se presentaba como blanco fijo, yendo siempre al frente. Más allá de un cross izquierdo recibido en su rostro, el mendocino cerró con una certera cruzada izquierda arriba.
Pero “Mickey” reaccionó en el comienzo del quinto, donde llegó con su derecha en cross al rostro. Sin embargo, siempre de contragolpe, la izquierda en punta del local reapareció, y si bien no la combinaba con su derecha, le quitaba precisión al nacido en Ciudad Juárez. Y sobre el final, repitió con su zurda curva a la mandíbula.
Ya en el sexto, los jabs de izquierda al rostro eran una pesadilla para el visitante, que no lograba acortar la distancia. Cada vez que daba el paso al frente, era taladrado por la zurda en punta del monarca, que llegó por triplicado. Segundos después, el local soltó su cross diestro al pecho, y un gancho izquierdo a la mandíbula, mientras comenzaba su bailoteo.
Así fue que el campeón repitió en el siguiente, con correctos pasos laterales y en retroceso, siempre con su izquierda en punta. Mientras el boxeo del argentino crecía, mermaba el ritmo y la puntería del mexicano, que intentaba sin éxito acorralarlo. Por ello, no sorprendió que llegara un certero uppercut derecho que se estrelló contra el mentón del retador, que comenzaba a sentir el ritmo del combate, abriendo su boca. Enfrente, el movedizo Barros continuaba dominando con su izquierda curva arriba y su cross diestro a la mejilla, tocando y saliendo.
Cuando parecía que las acciones se repetían en el octavo, con el mendocino manteniendo la distancia, se apoyó demasiado en las cuerdas, y “Mickey” lo aprovechó con un gancho diestro abajo, aunque sin mayores consecuencias. El local reaccionó y acertó una izquierda curva a la mejilla, y esquivó el riesgo con movimientos de cintura.
Se hacía prácticamente imposible acortar la distancia para el visitante cuando nuevamente, en el noveno, el argentino lo frenaba repetidamente con esos pesallidezcos jabs zurdos, que seguían mermando su andar. Tras ello, el campeón llegó con una dura combinación de gancho izquierdo al cuerpo y derecho al mentón, para luego continuar con su jab zurdo arriba y su cross diestro a la mandíbula.
Pero tras sufrir una derecha cruzada a la mejilla en el décimo, el chihuahuense reaccionó y, de contraataque, conectó con dureza su cross diestro al mentón, haciendo retroceder a su oponente. “Mickey”, envalentonado, fue al frente y acertó nuevamente su derecha cruzada al rostro, obligando al local a trabar. Tras ello, lo acorraló en una esquina e impactó su derecha en gancho al cuerpo y en cross al rostro. Y si bien el mendocino conectó una izquierda cruzada a la mandíbula, el azteca hizo lo propio con un cross diestro arriba.
De todas formas, la reacción del mexicano quedó en eso, y en el undécimo, reaparecieron los jabs zurdos al rostro del mendocino para frenarlo. Intentando pasar al frente para desbordarlo, el tozudo visitante se desordenaba, mientras el argentino tocaba y salía, caminando de costado, y acertando un buen cross diestro al rostro.
Sabiéndose ampliamente superior en las tarjetas, Barros salió a mantenerlo lejos en el duodécimo. No obstante, lo martirizó con su izquierda recta al mentón y un profundo cross diestro a la mejilla de un digno mexicano, pero que ya carecía de respuestas. Sobre el final, “Yoni” lo taladró con su zurda en punta, más los continuos esquives que dejaban en el aire los arrestos visitantes, y el bailoteo lateral con que se lució, para levantar a todo su público. Tras la campana definitiva, llegaría la predecible decisión de los jurados, que desató el festejo de los fanáticos locales, a sabiendas que la corona quedaría en casa.
De esta forma, Barros, que pesó 57,150 kg., retiene por primera ocasión el cetro que conquistara el pasado 4 de diciembre, en Las Heras, Mendoza, cuando derrotó por nocaut técnico en el séptimo capítulo al panameño Irving Berry, y aumenta su marca a 32 victorias (18 KOs), 1 derrota y 1 empate. En tanto Román, que también registró 57,150 kg., y se ubica en el noveno puesto del ranking AMB de la división, corta una racha de cinco éxitos antes del límite consecutivos, y desmejora a 33 triunfos (25 KOs) y 8 reveses.
En un cambiante combate de semifondo desarrollado en categoría supermosca, el campeón plata del Consejo Mundial de Boxeo (CMB), el mexicano Oscar “Ceviche” Ibarra (51,500 kg. y 26-4, 17 KOs) venció al argentino Ariel “Piquito” Alassia (51,900 kg. y 12-6-1-1 sd, 4 KOs), por nocaut técnico en el cuarto asalto, sin exponer su corona.
Tras arrancar falto de distancia, estudioso, y algo carente de ritmo, por lo que sufrió los contragolpes de su escurridizo rival, Ibarra sacó a relucir toda su potencia en el cuarto capítulo. Allí, conectó con dureza su gancho de izquierda a la zona hepática de un cordobés que acusó recibo, quedándose sin aire. Con decisión, “Ceviche” fue a la carga y con un veloz gancho zurdo al hígado, envió al local a la lona. Segundos después, y luego de someterlo con dos derechas cruzadas al rostro, lo tomó mal parado y acertó un recto de izquierda en punta al mentón, ocasionándole la segunda caída. Mientras el árbitro, Javier Luján, realizaba la cuenta, la esquina de Alassia decidió que el castigo había sido suficiente y arrojó la toalla, decretando el fuera de combate.
Previo a ello, fue el local quien llevó mejor las acciones. Apelando a sus veloces movimientos, y caminando de lado, jamás se presentó como blanco fijo. Así, conectó de contragolpe su izquierda curva al cuerpo y algún cross diestro arriba.
Incluso en el tercero, “Piquito” comenzó a bajar su guardia invitando al mexicano a pelear. Con rapidez, aprovechando que el visitante no encontraba su distancia, sacó mejores réditos de contraataque, con su cross derecho a la mandíbula y a la mejilla.
Pero en el cuarto, “Ceviche” dejó su tibieza de lado, y comenzó a trabajar a fondo. Rápidamente conectó su temible gancho zurdo a la zona hepática, seguido de un contundente cross diestro a la mejilla. Tras ello, con el cordobés contra las cuerdas, llegó esa potente izquierda en gancho al hígado, que acabó con un sentido Alassia en el suelo. Y luego de castigarlo con dos profundas derechas cruzadas al rostro, metió esa zurda recta en punta al mentón, ocasionando la segunda caída. Mientras escuchaba la cuenta, la esquina del cordobés dijo basta, y voló la toalla, poniendo punto final a las acciones.
En un combate complementario llevado a cabo en categoría superpluma, el ascendente invicto mendocino Juan Carlos “El Facha” Cano (58,500 kg. y 10-0, 4 KOs) superó al cordobés Matías Ezequiel González (58,500 kg. y 2-5-4), por puntos, en fallo dividido, tras cuatro asaltos.
En otros resultados de la noche, en categoría welter, el santafesino Cristian “El Travieso” Serrano (65,200 kg. y 11-3-3, 6 KOs), igualó ante el salteño Cristian Ruiz (63,600 kg. y 3-5-1, 2 KOs), por puntos, luego de cuatro rounds.
Además, en división supermediano, el mendocino Maximiliano Gastón Mujica (73,700 kg. y 2-0, 2 KOs) noqueó técnicamente en el primer capítulo al salteño Jonathan “El Leoncito” Frías (76 kg. y 0-4).
Finalmente, en peso superpluma, el tucumano Miguel Ángel Ibarra (57,200 kg. y 2-1, 1 KO) derrotó al santacruceño radicado en Tunuyán, Mendoza, Albín Alberto Arrué (57,400 kg. y 1-2), por puntos, en decisión unánime, tras cuatro episodios.
